Gran expectación ha creado el artículo de entrenamiento en altura. Muchos comentarios formulados desde distintos foros han mostrado su interés por este artículo y comentado la imposibilidad de realizar este tipo de entrenamiento en la inmensa mayoría de los corredores amateur.
El objetivo del artículo de entrenamiento en altura, además de conocer métodos de entrenamiento que utilizan corredores profesionales, es ver la gran diferencia en medios y conocimientos que nos separan de estos corredores, a los que muchas veces nos queremos parecer.
Un tipo de entrenamiento que está a nuestro alcance y que nos permite una gran mejora en el rendimiento es el Entrenamiento Vital.
Dependiendo del autor elegido, se pueden realizar diversas divisiones de los tipos de entrenamientos existentes. La que hemos elegido es la siguiente:
Entrenamiento Físico: El que realizamos con mayor frecuencia, sesiones de carrera continua, series, etc…
Entrenamiento Técnico: Para un buen rendimiento físico la técnica específica de la especialidad deportiva elegida es fundamental. En nuestro caso la técnica de carrera.
Entrenamiento Táctico: Preparar una buena estrategia durante la carrera es fundamental para obtener un resultado óptimo. Las distintas estrategias a desarrollar durante la competición deben ser imperativamente ensayadas durante el entrenamiento.
Entrenamiento Vital: Todos los corredores (profesionales y amateur) pasan más horas al día sin entrenar que entrenando. Por tanto, si queremos obtener un buen rendimiento, es aconsejable considerar esas horas de nuestra vida.
Aspectos mínimos a tener en cuenta son:
1. Ambiente en el que vive el corredor, su trabajo, familia, ocio (alcohol, tabaco, trasnochar), alimentación, horas de descanso y hábitos; analizando hasta que punto estas facetas influyen en su rendimiento.
2. Estado de salud: El entrenamiento supone una seria agresión al organismo, que solo se puede soportar con una buena salud. Es totalmente necesario el control médico periódico durante toda la temporada.
Muchos corredores amateur intentando imitar a los profesionales, realizan entrenamientos con cargas de trabajo, tanto de volumen como de intensidad, similares e incluso superiores a estos, para después obtener marcas mucho más discretas. Obviando el factor genético, la otra gran diferencia que puede explicar la diferencia en las marcas entre amateur y profesionales es el Entrenamiento Vital.
Como norma general, la mejora de esta parte del entrenamiento permite una mejora exponencial en el rendimiento. Esta mejora se consigue a base de emplear menos tiempo a la familia y más al entreno y al descanso; auto despedirse del trabajo si es demasiado exigente en horas de trabajo o en esfuerzo físico a realizar; por supuesto no fumar, no tomar alcohol; emplear parte del sueldo en pagar a un médico, fisio, psicólogo y entrenador. La pregunta que nos debemos formular es: ¿Merece la pena tanto sacrificio para no siempre conseguir el objetivo buscado?
La Manada de Bisontes lo tiene claro, CORRE Y SE FELIZ, aunque esto suponga no ser un “PRO”.
BE WATER MY FRIENDS
enhorabuena por vuestro blog¡¡¡¡ las modas en esto del "atletismo popular" son muy cambiantes: ahora los "buenos" entrenan y se cuidan cada vez menos y curiosamente los "trotoncillos" son esclavos de dietas extrañas, carreras interminables en el quinto pino (sin la familia por supuesto), toman suplementos rarisimos y gastan un dineral en "entrenadores personales" y fisios.
ResponderEliminarel signo de los tiempos, menos mal que aun hay alguna manada que se sale del redil. aupa cuadrilla¡¡¡¡ mucha suerte con el proyecto ¡¡¡¡¡
totalmente de acuerdo!
ResponderEliminarestos días de pretemporada estoy corriendo por el simple hecho de correr, según sensaciones, sin ningún plan establecido, simplemente correr y disfrutar del paisaje. y vaya si lo estoy disfrutando! no sé si cumpliré los objetivos que me he planteado esta temporada, ojalá que sí, pero si no lo consigo, recordaré al menos que hoy, corriendo, me he sorprendido entre resoplidos esbozando una sonrisa sin querer.
un consejo para los adictos al cronómetro:
VÉ AL VÁTER MY FRIEND