VII CARRERA DEL EBRO

El pasado domingo día 10 de marzo la VII edición de la prueba cívico-militar “Carrera del Ebro”congregó a casi 2.200 deportistas en el CAD (Centro Aragonés del Deporte) de Zaragoza.

Un año más los Bisontes del Cierzo no podían faltar a esta cita ya clásica en nuestro calendario deportivo, contando entre otros con la presencia de Bisonte Percheron, Bisonte Tarantino y la mia Bisonte Chory.

Este año la prueba, organizada por UNESCO Aragón Deporte, la Asociación de Naciones Unidas en España-Aragón (ANUE) y la Brigada Castillejos -RACA 20, presentaba una novedad más que atractiva: 2 carreras, 2 recorridos: la tradicional prueba Popular 14k y la denominada Ultra Trail 30 kilómetros.

Aquí he de hacer una apreciación personal, y es que a mi humilde entender una prueba ultra trail no es esto. Entiendo que por motivos publicitarios, y con el fin de atraer inscripciones, la organización haya optado por este nombre pero esto no quita que a los verdaderos corredores que preparan y disputan pruebas ultras (de trail o de fondo, siendo la distancia por excelencia en torno o superior a los 100km, entre otros factores) sientan un menosprecio a su trabajo y esfuerzo.

Cada cosa tiene su nombre como las distintas modalidades de duatlón/triatlón y cualquier otra disciplina deportiva.
Como no podía ser de otra manera, la idea de disputar 30km me parecía una buena opción de cara a complementar mis entrenos para este año lleno de diferentes pruebas por  montaña, entre ellas dos ultra trails.

Mi objetivo para esta prueba, como casi siempre, lejos de buscar clasificación alguna era disputar la carrera como si entrenara para recorrer al menos 70 km de distancia. Es por ello por lo que decidí correr con mochila, con depósito extra para liquido y diferentes tipos de comida para así poder entrenar “cuando beber y cuando comer” sin tener en cuenta los cuatro puntos de avituallamiento líquidos puestos por la organización.

A las 9:00 se dio la salida cuya prueba transcurrió, en su mayoría, a través del Campo de Maniobras de San Gregorio en un recorrido desértico y agreste con su encanto natural pero lejos de la belleza de los parajes de las carreras por montaña disputadas por cotas superiores a los 1000m. El trazado, sin ninguna subida y bajada demasiado exigente pero sí lleno de toboganes, estaba adornado con algún cañón y carro de combate.
Transcurridos ya buena parte de los kilómetros, aproximadamente sobre el 25, llega el último tramo liso que discurre por la bonita ribera del Ebro. Aquí y teniendo todavía muy buenas sensaciones y piernas me permito el lujo de rodar manteniendo un ritmo de 4min/km hasta el final de meta, adelantando a algunos corredores que en los kilómetros iniciales me pasaron como un “sputnik”.
El mayor éxito personal en esta carrera ha sido cubrir los 30km acabando con las fuerzas y sensaciones suficientes como para seguir corriendo otros 30km, todo ello gracias a la buena planificación y ejecución de ingesta de líquido y diferentes tipo de sólido.
En general fue un buen día para acumular kilómetros pero una pena que solo tuviese unos 520m de desnivel positivo.

Al final un discreto puesto 42º/16º categoría militar en 2h y 13 min. pero con la inmensa satisfacción  de irme a casa con el trabajo bien hecho y comprobar como los duros, largos, fríos, lluviosos y “cierceros” días de entreno van dando resultado de cara a una temporada personal que está por empezar.
Igualmente contento me voy tras ver en meta a muchos compañeros “cierceros” y también de conocer a nuevas incorporaciones dejando entre todos al ZENIT TRIATLON CIERZO en el buen lugar que se merece.

ENHORABUENA A TODOS!!!!